Entradas

Changing batteries...

Imagen

J'aime Paris au mois de mai...

Imagen

París no se acaba nunca...

Imagen
Eugène Atget,  Organillero << París  no se acaba nunca , y el recuerdo de cada persona que ha vivido allí es distinto del recuerdo de cualquier otra.  Siempre hemos vuelto , estuviéramos donde estuviéramos, y sin importarnos lo trabajoso o lo fácil que fuera llegar allí.  París  siempre valía la pena , y uno recibía siempre algo a trueque de lo que allí dejaba. Yo he hablado de París según era en los primeros tiempos, cuando  éramos muy pobres y muy felices >> . Ernest Hemingway,  París era una fiesta

Cervantes...

Imagen

A Shakespeare...

Imagen

Por el Día de la Tierra...

Imagen

El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha

Imagen
Miguel de Cervantes, El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha Si haces clic en el enlace que te señalo entre flechitas , te encontrarás con la página que la Biblioteca Nacional de España creó en homenaje a Don Quijote: un lugar maravilloso en donde la música lo envuelve todo , ofreciendo al visitante la posibilidad de descubrir asimismo las rutas por las que anduvieron de mentira Don Quijote y Sancho Panza ; cuáles eran las costumbres de las gentes que los rodearon y un largo etcétera de curiosidades que, si eres bibliófil@ como yo, te encantarán. ¡Ah! Y lo más importante: podrás hojear , como si de un libro real se tratase, las páginas que compusieron la primera edición de la obra … ¡Que la disfrutes! ♡ ↪   Don Quijote  interactivo   ↩

"Morir es dormir...

Imagen
Anónimo, Procesión de personajes de las obras de Shakespeare y tal vez soñar". William Shakespeare,  Hamlet  

Los fantásticos libros voladores del señor Morris Lessmore

Imagen

Acaso

Imagen
Como atento no más a mi quimera no reparaba en torno mío, un día me sorprendió la fértil primavera que en todo el ancho campo sonreía. Brotaban verdes hojas de las hinchadas yemas del ramaje, y flores amarillas, blancas, rojas, alegraban la mancha del paisaje. Y era una lluvia de saetas de oro, el sol sobre las frondas juveniles; del amplio río en el caudal sonoro se miraban los álamos gentiles. Tras de tanto camino es la primera vez que miro brotar la primavera, dije, y después, declamatoriamente: -¡Cuán tarde ya para la dicha mía!- Y luego, al caminar, como quien siente alas de otra ilusión: -Y todavía ¡yo alcanzaré mi juventud un día! Antonio Machado